No, no me equivoqué con la fotografía. Los años 80 están aquí y nos invaden con su colorido, una explosión cromada y maravillosa, llena de tonos cálidos, alegres, optimistas, que te harán sentir joven y radiante este verano. La pasarela que hoy os muestro es totalmente representativa del color que va a invadir nuestros pies y manos esta temporada. Siguen los rojos, pero abandonando el cereza y dándole paso al tono más intenso, al fresón.
Continúan también los morados, pero no en su línea oscura que nos traía el berenjena, sino bajando tonalidad para agarrarse a los lilas y violetas. Los rosas de este año son más chicle que nunca, muy muy chicle, rosas totalmente Barbie. Veremos azules turquesa en nuestra manicura, y también verdes, pero estos últimos serán fosforitos, muy chillones. Abandono del dorado, que da paso al amarillo, un amarillo limón muy fuerte.
