Este pasado mes de agosto Miley Cyrus sorprendía a todos sus seguidores con su radical cambio de look. Unas fotografías colgadas en su cuenta oficial de Twitter mostraban su nueva imagen totalmente rompedora y modernizada. Con este gesto decía adiós a su mítica melena con la que se había hecho tan popular en su etapa como Hannah Montana, dando el paso definitivo de niña a mujer que tanto ansiaba.
Lejos de mostrar el mínimo arrepentimiento, Miley no se cansó de declarar en numerosas ocasiones que estaba contentísima con el cambio, que nunca se había sentido tan a gusto consigo misma. A partir de ese momento, no ha parado de recibir a su estilista para seguir modificando su nuevo corte a base de nuevos toques de tijera o de cambios de color, aunque estos últimos siempre dentro de la línea de los rubios.
Cambios constantes
La actriz y cantante luce indistintamente mechas doradas o se tiñe por completo de rubia platino, llegando al límite de los blancos. Del mismo modo, su corte de pelo inicial fue transformándose en los últimos meses, en los que hemos podido percibir cómo su nuca y laterales de la cabeza cada vez lucen más recortados, a la vez que el mechón central también va disminuyendo en espesor y longitud. Después de una temporada luciendo diversos tupés exageradamente alzados, hoy la artista ya se acerca más al estilo “pelopincho”.
Máxima comodidad
Lo que está claro es que Miley se ha enganchado al pelo corto, algo que le ocurre a un gran número de mujeres. Esto puede deberse a que este tipo de looks, además de modernos, te ofrecen la máxima comodidad en el arreglo diario, tanto en la ducha como a la hora de peinarlo. Aunque si sigue a este ritmo, poco pelo será el que le quede para poder variar de imagen tan a menudo.