Ya sabes que existen delineadores de todo tipo. De hecho, en Maquilladas ya te hablamos de los diferentes tipos de delineadores que existen en el mercado y qué tonalidad te conviene más según tus ojos. Hoy queremos ir un poco más allá y centrarnos en el delineador de color blanco.
Aunque muchas no lo sepan, el delineador blanco es súper útil a la hora de maquillarse, pudiéndose conseguir resultados increíbles. Éste nos ayuda a lograr una mirada iluminada y despierta, agrandando los ojos pequeños e, incluso, destacando el color. Para que puedas sacarlo por fin del neceser y sacarle todo el provecho posible, hoy vamos a darte todas las claves. ¿Preparada?
Si aplicas el color blanco dentro del párpado inferior conseguirás agrandar los ojos pequeños y resaltar la mirada y el color de los ojos. Para lograr este resultado será necesario que el delineador sea cremoso y de buena calidad. También es importante que no te lo apliques muy recargado, ya que se verá muy artificial. Solo necesitarás una pasada y la máscara de pestañas. Si crees que te ha quedado demasiado blanco puedes difuminarlo suavemente con un bastón de algodón
Si te lo aplicas en la “V” interna del ojos, es decir, sobre el lagrimal, iluminarás la mirada y destacarás el color de sombra que lleves, generando ilusión de mayor espacio entre los ojos muy juntos. Por el contrario, si delineas con lápiz blanco encima de un delineado líquido en negro, conseguirás un efecto preciso y muy intenso.
Además, puedes usarlo como base blanca para que los colores de las sombras resalten más, siempre y cuando no tengas los párpados grasos. Por último, el delineador blanco te servirá para destacar y dar volumen a los labios, marcando suavemente el arco de cupido y el surco bajo la nariz.