La piel del rostro es uno de los grandes delatores del paso de los años y también de nuestro estado físico y psicológico, y es que la delicada y fina piel de nuestro contorno de ojos a veces habla por sí misma.
Aunque llevas años intentando mantener el sano aspecto de tu rostro con algunas cremas hidratantes debes saber que esto ya no es suficiente, y es que cada problema como las ojeras, las patas de gallo o las bolsas, por ejemplo, necesitan una solución específica dedicada únicamente a ella.