Hace poco hablábamos de cómo conseguir un perfecto recogido con tupé, una imagen que podía adaptarse a múltiples estilos, tanto de gala como del día a día. Un peinado que se mostraba tan elegante como juvenil y que te permitía disfrutar de una imagen diferente por unas horas. En el caso de hoy veremos las variantes que presentan este tipo de recogidos de cara a la próxima temporada otoño-invierno.
La gran diferencia entre los recogidos con tupé que veremos a lo largo de 2013 es el aspecto informal y desenfadado que presenta el look final. Se parte de la misma base que consiste en retirar el pelo de los lados y la nuca, completamente pegado al cuero cabelludo, simulando pelo corto. Del mismo modo, con productos específicos de peinado (como gomina, espuma o laca), se fija el pelo a la vez que se le da un efecto húmedo y brillante.
La parte frontal no viene tan hacia la frente, sino que sube como una pequeña montaña, así como es en este punto en el que comenzamos a apreciar imperfecciones. El cardado inicial no se deshace ni se oculta del todo, para favorecer ese efecto despeinado. El tupé en sí, visto desde enfrente, parece estar elaborado en varios mechones que no llegan a juntarse por completo. A pesar de poder lucir un tupé con todo el pelo hacia atrás, la tendencia viene marcada por los que tienden a un ligero giro ladeado, aunque no muy pronunciado.
La parte más artística, aunque parezca totalmente casual, la encontramos en que las puntas no se recogen ni se ocultan, sino que dan el toque de distinción para conseguir que estos recogidos sean informales y deshechos. Un efecto que se podrá percibir tanto por delante como por detrás, tal y como puedes ver en ambas fotografías.