Tener unas pestañas más voluminosas y curvadas es el sueño de muchas personas ante las tendencias de moda que imponen este tipo de estética en el que es clave tenerlas también bastante más largas. Pero alargarlas no siempre es fácil, a no ser que se recurra a extensiones, porque las pestañas tienen como un tope de crecimiento en cuanto a su longitud. Sin embargo, hay tratamientos que permite aprovechar toda su largura natural y potenciarla. Es el caso del lifting de pestañas. Pero, ¿en qué consiste? ¿Cómo se hace?
¿Qué es el lifting de pestañas?
El lifting de pestañas permite sacarle el máximo partido a las pestañas que tenemos, ya que es una técnica que permite estirar cada pestaña desde su raíz para elevarla.
De esta manera, con esta elevación, se consigue que la pestaña natural parezca que es mucho más larga de lo que inicialmente se percibía a simple vista.
El tratamiento
El lifting es un tratamiento que requiere más pasos que van más allá del estiramiento y elevación de la pestaña. Y es que también hay que aplicar un coctail de vitaminas y queratina.
Con ello, se consigue nutrir la pestaña y aportarle más grosor a cada pelo, además de generar también el efecto de darles más densidad a las pestañas. Y, finalmente, aún queda otro paso más porque se tiñe la pestaña para dar más profundidad.
El tratamiento tiene la ventaja de que, a pesar de que hay realizar diferentes pasos, se lleva a cabo en una hora aproximadamente. Además, la duración es de alrededor dos meses.
Extensiones
Y, si aún con todo no has conseguido el efecto deseado porque tienes pocas pestañas, no queda más remedio que acudir a las extensiones. Pero es importante elegir bien el tipo que te vas a poner, siendo mejor optar por las que se colocan una a una, ya que el resultado es menos artificial que las que se colocan con la tira única.
El problema está en que tendrás que hacer retoques con más periodicidad, ya que suelen durar intactas unas dos o tres semanas aproximadamente.
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