Elegir entre tinte o mechas

El color del pelo es algo que no podemos ocultar. Es lo primero que impacta de nuestra imagen y por tanto, debemos buscar la mejor elección. Hubo un tiempo en que las opciones de colorido pasaban por rubio, castaño o moreno. Actualmente ese abanico se ve muy ampliado, tanto en colores posibles como cobrizos, rojizos, etc.; como en colores imposibles: verdes, morados, azules… El tinte ya no es sólo una opción para cubrir las canas, es un mundo lleno de posibilidades que ayuda, incluso, a darte más brillo y volumen.

Eso sí, antes de teñirte deberás tomar conciencia de que los cabellos coloreados necesitan unos cuidados específicos: productos hidratantes y retoque de raíces. Mentalízate antes de hacer el cambio, porque tu pelo natural nunca volverá a ser el mismo. Elegir como cambiar el tono va a depender mucho de las necesidades que tengas. Si lo que buscas es cubrir unas primeras canas pero mantener tu tono natural, lo mejor serán los baños de color o tintes naturales; desaparecen con los lavados y no te ves forzada a los retoques. Si ya es mucha la cana que tienes que cubrir, no serán muy efectivos, ya que su bajo o nulo contenido en amoníaco impide la cobertura total.

Si eres castaña y quieres unos reflejitos, lo mejor serán las mechas de tinte, quedan muy naturales y no requieren mucho retoque. Para rubias, las mechas decolorantes son las que más favorecen; lo que ocurre es que al final siempre resalta una raíz muy oscura que acabamos por cubrir con tinte; lo mejor es teñirse de castaña y comenzar a quitar mechas de nuevo. En cualquier caso, no tenemos porque decantarnos por un solo look, ya que a veces distintos tonos nos favorecen, y la cosmética capilar actual es de buenísima calidad, por lo que puedes teñirte con tonos medios y hacer una nueva elección sin que tu pelo se resienta.