El año 2012 ya está aquí y fueron muchas las personas que eligieron darle la bienvenida tomando las uvas al son de las campanadas que presentó Isabel Pantoja junto con su hijo, Kiko Rivera, y el presentador de televisión Jorge Javier Vázquez. Como si de una boda se tratara, el vestido, maquillaje y peluquería de la tonadillera fueron el gran secreto que mejor se guardó hasta breves minutos antes de la medianoche.
La espera valió la pena puesto que la aparición de Isabel no pudo haber resultado más vistosa y espectacular, siendo en mi opinión una de las ocasiones en que más guapa y favorecida la he encontrado. Victorio y Lucchino fueron los encargados de vestir a la artista para esta ocasión tan especial, y vaya desde aquí mi felicitación ya que sólo puedo decir que el modelo es impresionante.
Un complejo y favorecedor entramado de encaje rojo subía por el escote de Isabel hasta casi cubrir un hombro, un diseño que requería a todas luces de ser acompañado por un peinado a modo de recogido, facilitando así la labor de su vistosidad. Acostumbrada a ver a la Pantoja con el pelo completamente retirado hacia atrás, he de decir que la idea frontal de recogérselo partiendo de una raya al lado fue todo un acierto, mostrándola más joven y actual.
Muy buena también la labor del equipo de maquillaje, que han logrado que el tono de piel, así como cada rasgo del rostro, mostraran a una Isabel rejuvenecida y muy atractiva. Los ojos lucían un completo delineado en negro que le daban mucha expresión y protagonismo a su mirada, reforzada por unas pestañas muy voluminosas. Los labios mostraban un moderno tono natural que se veía reforzado por la perfecta aplicación del colorete, un blush melocotón que perfilaba sus facciones y cerraba un maquillaje que merece un 10.