El ácido hialurónico es uno de los productos que se ha convertido en estrella en el mundo de la cosmética y no solo para infiltrarlo, sino para aplicarlo sobre la piel a través de diferentes cremas y productos para la belleza. Y razones no faltan para emplearlo porque todo son bondades. Pero, ¿cuándo es recomendable empezar a aplicarlo? ¿Qué zonas son las que lo necesitan? A estas y otras preguntas, les damos respuesta.
Entre 25 y 50 años
El ácido hialurónico empieza a disminuir a partir de los 25 años de forma natural. Es el momento así de empezar a cuidarse y a utilizarlo para mantener una piel hidratada, más joven y libre de arrugas.
Estos primeros cuidados –siempre que no haya signos de envejecimiento muy marcados-, deben hacerse a través de la aplicación de cremas que los contengan. Muy buenas opciones son los sérums, boosters y ampollas, producto este último en el que hay una gran concentración.
Incluso es posible encontrarlo en bases de maquillaje, contornos de ojos y cremas. Este amplio abanico de productos permite empezar a usarlo en las zonas más conflictivas para evitar los procesos del envejecimiento.
A partir de los 50 años
Cuando se han cumplido ya los 50 años, la pérdida de ácido hialurónico es mayor. El cuerpo ya solo produce de forma natural el 50%. Esto hace que empiece a aparecer la flacidez y las arrugas.
En estos casos, además de las cremas y de todos los cosméticos que contienen el ácido hialurónico, puede ser conveniente empezar con las inyecciones de relleno, aunque todo depende del estado de la piel porque, a veces, no es tan necesario al no estar tan marcadas las arrugas o ser tan evidente la flacidez.
De todos modos, las inyecciones de relleno no eximen de usar las cremas. Se trata de reforzar y de aportar el mayor bienestar posible a la piel.
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