Está claro que el pelo es una parte fundamental de nuestra imagen, y de cómo lo llevemos arreglado dependerá en gran medida lo que muchos piensen de nosotras; si además, tenemos una larga melena ondulada, los cuidados han de ser mucho más exhaustivos, ya que las puntas tienden a abrirse si no las cortamos con asiduidad, a la vez que también van mostrando un aspecto más descolorido.
Por lo general, la mayoría de nosotras llevamos en el pelo algún trabajo técnico de color, bien sea tinte o mechas o, en ocasiones, ambos, lo que supone un daño añadido, a pesar de que la industria capilar cada vez se ocupa más de que sus productos sean lo menos dañinos posibles.
En estos casos, es fundamental que nos lavemos el pelo con mucha atención, eligiendo aquellos productos que más nos ayuden a mantener la salud de nuestro cabello, y pudiendo combinar diferentes beneficios, como puede ser, por ejemplo, un champú para cabellos teñidos, con el que mantendremos el tono sin que se estropee, y aplicar después una mascarilla reestructurante que, además de aportar toda la hidratación que necesitamos, también nos ayudará a mantener la apariencia perfecta en las puntas.
A la hora de peinarse, es muy importante evitar los tirones, por lo que siempre procederemos a desenredar por mechones, empezando por las puntas y subiendo hacia la raíz. Retiraremos el exceso de agua con una toalla, pero sin retorcer, y procedemos a elaborar el peinado que, en muchos casos, quedará mejor fijado si te ayudas de una espumita suave, en este caso, para cabellos rizados, ya que contienen elastina, un ingrediente que cierra el pelo en un bucle, impidiendo que quede encrespado.
A partir de ahí, este año podemos disfrutar de un sinfín de ideas que retiran la parte frontal de la melena hacia atrás, bien sea con trencitas, torciditos, o unas simples horquillas, una solución que te permitirá mantenerte peinada por muchas horas y, a la vez, lucir una melena envidiable.