Con el paso de los años o bien por hacer gestos, como el que se realiza para fumar, van apareciendo pequeñas arruguitas en la boca. Es lo que se conoce popularmente como el código de barras. Son unas líneas que no siempre son fáciles de quitar, aunque los últimos tratamientos y técnicas permiten conseguir buenos resultados, logrando rejuvenecer la boca. Sea cual sea el motivo por el que te han aparecido esas arrugas, aquí te contamos algunas soluciones.
Tratamientos
Uno de los tratamientos que se realiza en centros de estética es el denominado Smart Xide Dot, que se emplea para borrar las arrugas de alrededor de la boca, además de recuperar el contorno.
La ventaja de este sistema es que el proceso de recuperación es mínimo, además de no existir el riesgo de hiperpigmentación post-inflamatoria.
Además, el resultado es bastante bueno porque el contorno de los labios se renueva por completo, quedando la piel lisa y libre de esas arruguitas. También el perfil de los labios queda más realzado de forma natural.
Aparte de este tratamiento también hay otra solución, que se basa en el ácido hialurónico. En este caso, lo que se hace es aplicar un relleno inyectable con el que se eliminan las arrugas de forma eficaz.
Entre sus beneficios, además de acabar con las líneas de expresión, también está el hecho que la piel gana en elasticidad y se recupera el volumen labial con un resultado bastante natural.
Esto se logra precisamente por el ácido hialurónico, que contribuye a reponer el ácido hiaulórico natural que la piel de esta zona del rostro ha ido perdiendo con el paso del tiempo.
Cuidados adicionales
En casa, igualmente es posible seguir tratamientos para eliminar el código de barras de los labios. En concreto, se deben aplicar cremas específicas que tengan acción antidescolgamiento, aparte de ser antiedad y nutritivas. El objetivo es así ganar en elasticidad y firmeza, además de aumentar la compactación cutánea.
Son productos que no solo se pueden aplicar cuando ya han aparecido las arrugas, sino también de forma preventiva, sobre todo, a partir de los 40 años de edad, que es cuando en general comienza a cambiar el aspecto de esta zona del rostro.
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