La revista masculina Esquire acaba de presentar la portada correspondiente al número de noviembre, en la que la protagonista es Mila Kunis, quien ha sido elegida por dicha publicación como la mujer más sexy de 2012. En dicha portada podemos ver a la actriz con un ceñido pantalón de cuero negro, posando casi de espaldas con el torso desnudo, cubriendo el pecho con el brazo.
En el interior de la revista posa también con poquita ropa o en ropa interior, quizá en un intento de relacionar lo sexy con la desnudez, algo que en mi opinión no tiene por qué ir ligado necesariamente. Personalmente creo que la sensualidad es más una actitud que una vestimenta, y en este caso concreto, Mila carece completamente de ella durante la sesión fotográfica. Es mona y tiene tipo, sí, pero no por ello es sexy.
El estilismo que luce la actriz en este posado tampoco le favorece especialmente. El maquillaje es moderno, basado en técnicas tan actuales como el nude y los ojos enmarcados, pero no transmite la intensidad que debería, algo que quizá tenga más que ver con ella misma que con el maquillador. Su trabajo ha consistido en crear un ancho delineado negro en la totalidad del ojo, cubriendo luego el párpado con un dúo de sombras en marrón y beige, al que se suma un toque de iluminador en el marco de la ceja.
En cuanto al peinado, Mila luce la melena suelta, ligeramente moldeada, huyendo así del liso total, que cada vez se lleva menos. El color es un castaño que se va aclarando hacia las puntas, en las cuales destaca alguna mecha dorada. La verdad es que me gustó mucho más con la melena redonda estilo años 50 que lucía en la campaña de bolsos Miss Dior, de la que hablamos hace un par de meses. Ahí estaba mucho más atractiva, original y moderna.