Ya sea porque se acerca el día de San Valentín, porque piensas preparar una cena romántica a tu pareja o sencillamente porque vas a pasar una velada especial, es imprescindible que aprendas cuál es el mejor maquillaje para estas ocasiones.
Lo más probable es que quieras una imagen dulce pero a la vez sexy, que diga ‘soy tu chica ideal’ a tu acompañante pero que además llame a la sensualidad y a la pasión. Conseguirlo es realmente fácil, pues sólo tienes que saber escoger los mejores colores y combinarlos con algunas sencillas técnicas de maquillaje. ¿Quieres ir perfecta? No lo pienses más y guíate por estos consejos.
Lo principal es mostrar un cutis perfecto, lo que conseguiremos solamente si nos esforzamos por ocultar las imperfecciones más visibles del rostro y por conseguir una buena base para el resto de maquillaje.
Oculta granitos, ojeras o arrugas con los correctores más adecuados a cada problema y aplica también iluminador en las zonas clave de la cara (aunque dependerá de las características de ésta, suelen favorecer algunos toques en la frente y bajo el arco de las cejas).
Para conseguir un aspecto muy natural, lo mejor es utilizar una base de maquillaje de efecto mate en el mismo color de tu tez y espolvorear algunos polvos translúcidos para conseguir un aspecto muy natural.
La mirada debe ser también seductora pero discreta, por lo que te recomendamos hacerte solamente con una sombra de ojos clarita o nacarada que ilumine todo el párpado y un eye liner negro para perfilar la línea superior de las pestañas (muy finita en el lagrimal y más ancha a medida que se acerca al exterior del ojo). El rimmel no debe dar un aspecto recargado y artificial a la mirada, por lo que lo mejor es que busques aquellos más ligeros que consigan dar un poco de color y curvatura a las pestañas.
Cómo no, el blush más romántico es ese que te hace parecer dulcemente sonrojada, por lo que es imprescindible que apliques los tonos rosados que te dejen una piel de efecto aterciopelado.
Acabamos con los labios, grandes protagonistas de este maquillaje. Para hacerlos jugosos, apetecibles y algo prohibidos no tengas miedo en utilizar el color, especialmente los borgoña o rojo pasión en sus versiones más mate.