Hace ya un par de meses que la popular Kim Kardashian celebró su boda con el jugador de la NBA Kris Humphries (el pasado 20 de agosto) y todavía no habíamos hecho mención de su estilismo.
Este día la guapísima Kim confió como siempre en su maquillador habitual, Mario Dedianovic, que consiguió dar un aspecto dulce y romántico a la explosiva presentadora realzando como siempre sus rasgos más llamativos.
¿Te gustó su maquillaje de boda? Entonces atiende, porque en este artículo te comentamos algunas de las claves.
Como vemos en las pocas imágenes que se han publicado de la boda, su rostro lucía mate y sin un solo brillo que estropease su aspecto. Esto es posible gracias a unos cuidados continuos por parte de Kim pero también por algunos cosméticos como los papeles matificantes o los polvos traslúcidos, que además ayudan a que el maquillaje dure más tiempo.
Su mirada era tan impactante como nos tiene acostumbradas, y es que aunque los tonos de las sombras de ojos eran suaves y le conferían un aspecto dulce y delicado sus larguísimas pestañas mostraban la sensualidad de siempre. Los tonos empleados fueron desde los dorados más suaves para iluminar el párpado superior hasta los tonos dorados y marrones para conseguir un acabado ahumado sobre el párpado móvil.
En cuanto al resto del maquillaje Kim fue de lo más natural con un blush rosado y unos labios en los que sencillamente se apreciaba un suave tono rosa con un toque de gloss.
El peinado fue también de lo más sencillo, un moño bajo con todo el cabello hacia atrás decorado por una diadema de brillantes sobre la frente y un larguísimo velo blanco.
Desde luego esta vez sí que podemos decir que Kardashian acertó de pleno en todos los sentidos, y es que para un día tan especial supo dar con el toque más romántico renunciando su habitual explosividad un tanto artificial.