Son innumerables las veces que has podido oír eso de que es necesario exfoliar tu piel si quieres mantenerla bella, cuidada y joven. Sin embargo, y aunque te haces a la idea de en qué consiste el asunto, a veces no sabes exactamente qué quiere decir esto y cómo deberías hacerlo.
Para las que todavía sois poco experimentadas en esto, os diremos a modo de resumen que exfoliar la piel no es otra cosa que eliminar de la piel todas esas células muertas que quedan tras la regeneración de la misma, aproximadamente cada 21 o 28 días.
Aunque el cuerpo es capaz de restaurar las células muertas por sí solo y de manera natural, con el tiempo pasamos por algunos periodos en los que el proceso se hace más lento y difícil haciendo que la piel pierda su oxigenación natural: El resultado es una piel más apagada, triste y envejecida.
La solución para evitar que esto ocurra está completamente en tus manos, pues tú también puedes tomar el hábito de exfoliar semanalmente tu piel para mantenerla sana y fresca.
Lo primero antes de exfoliar tu piel es tener en cuenta sus características, pues cada tipo de piel (seca, grasa, mixta…) puede requerir soluciones distintas que se adapten a ella. A partir de aquí, será cuestión de escoger los métodos y productos más adecuados en cada caso:
– Productos exfoliantes: Se trata de geles o cremas con pequeños gránulos exfoliantes de distintos tamaños que al ser aplicados con suaves masajes sobre la piel favorecen la eliminación de las células muertas. Además, cualquiera de ellos tiene propiedades suavizantes que devolverán la hidratación y la luminosidad a tu rostro.
Eso sí, no utilices nunca los mismos productos para exfoliar rostro y cuerpo, porque estos últimos podrían ser demasiado fuertes para tu cutis.
– Exfoliantes caseros: También existen muchos trucos y remedios caseros para exfoliar la piel. Aunque ahora no podemos contártelos todos, algunos productos naturales muy utilizados para este fin son la arena del mar, la arcilla, la avena, la arena o la pasta de arroz, ingredientes con los que fácilmente podrás hacer tus propios exfoliantes caseros.