El otro día, cuando veíamos los errores más habituales en el uso del rímel, os contaba que cuando utilizamos una máscara que está vieja o seca el maquillaje no luce con el resultado deseado, ya que las pestañas quedan apelmazadas y con grumos. Si todavía te queda producto y no quieres tirarlo antes de que se termine, te voy a contar unos trucos que te ayudarán a recuperarlo y que lo puedas seguir empleando durante más tiempo. Algunos son soluciones temporales, con otras igual puedes alargar un tiempo tu máscara de pestañas para evitar deshacerte de ella antes de tiempo. Te contamos cómo puedes conseguirlo a continuación.
Sin tocar el producto
El primer truco consiste en ablandar la máscara sin necesidad de alterar el producto, para evitar que esto pueda tener repercusiones en nuestros ojos. Para ello, cierra bien el bote y sumérgelo en agua caliente durante unos 5 minutos. Conseguirás que se ablande y lo aplicarás con más facilidad. Lógicamente se volverá a secar pero te puede ser de utilidad en un momento puntual.
Con aceite
Otra manera de recuperar el rímel seco es aplicando una gotita de aceite de oliva dentro. Y nada de mezclar con aplicador, deberás agitar el bote cerrado y así alargarás su uso unas cuantas aplicaciones más. También lo puedes hacer con aceite de almendras. Lo dicho, con una gota es suficiente, si pones un exceso de aceite echarás a perder del todo tu rímel…
¿Por qué se seca la máscara de pestañas?
Un rímel suele durar en buenas condiciones unos seis meses, pero como nos gusta mucho eso de meter y sacar todo el rato el aplicador, aceleramos el proceso y se seca antes. Con sacarlo una vez para maquillarte, suficiente, no lo agites con fuerza porque únicamente harás que se esté estropeando antes de tiempo.
Gracias por los trucos para recuperar el rimel, los probaré.