Si queremos mantenernos guapas y saludables durante mucho tiempo, es muy importante que sigamos unas rutina diarias. El cuidado de la piel es importantísimo y hay zonas que requieren mayor atención que otras. Es el caso del contorno de ojos, una parte del rostro muy delicada. Muchas mujeres no saben que la piel de esta zona es cinco veces más finas que en el resto que, además, está sometida a constante actividad.
Es por este motivo que en esta área del rostro son más evidentes los efectos del cansancio, del estrés o del paso del tiempo. En esta zona se encuentra un alto porcentaje de mastocitos, las células responsables de las reacciones alérgicas explosivas, lo que explica la frecuencia de reacciones o de intolerancia en el contorno de los ojos. Todo ello provoca la aparición precoz de arrugas y líneas de expresión con el agregado de bolsas y ojeras que acaban con la brillantez de tu mirada y sonrisa.
Para mantener cuidada esta zona, es esencial utilizar productos específicos, cremas formuladas con hidratantes potentes que incluyan menos ingredientes activos potencialmente irritantes. Si lo que quieres es mejorar las bolsas, te irán genial algunos tratamiento como, por ejemplo el drenaje linfático, que se realiza en los centros de belleza especializados. Sin embargo, los cosméticos son sólo efectivos si las bolsas son ligeras. A medida que nos vamos haciendo mayores, las bolsas se van acentuando, ya que la piel se relaja y cae. Por eso, llega un momento que solo la cirugía estética puede eliminarlas.
En cuanto a las ojeras, debes saber que no tienen relación directa con el envejecimiento cutáneo. Por un lado están las temporales, que suelen aparecer a última hora del día y se deben a una congestión vascular. Por otro lado están las permanentes, que provienen de una hiperpigmentación de la piel y/o una microcirculación perezosa. Éstas suelen ser hereditarias. Además, debes saber que el cansancio, el estrés, el abuso del alcohol y del tabaco las acentúan.