A lo largo del último año hemos venido hablando mucho de la gran tendencia que hay por recogerse el pelo, ya sea con una trenza ladeada, una coleta cayendo sobre el hombro, y especialmente con moños y recogidos casuales e informales, que resultan muy favorecedores, cómodos y prácticos, además de que no requieren tener una maña especial para que puedas hacértelos tú misma en cualquier momento y cambiar de look estando siempre a la moda.
Pues bien, lo que hoy quiero enseñarte es todo lo contrario, es decir, el recogido que jamás podrás lucir a lo largo de todo este año y que si lo haces tu imagen será anticuada, pasada de moda, y te hará mucho mayor. Dicen que “como muestra un botón” y eso es lo que hoy te traigo con esta fotografía, el mejor ejemplo del moño que no debes ponerte bajo ningún concepto, ni para bodas ni para ningún otro tipo de evento.
El moño que hoy te traigo fue toda una revolución en su día, y consiste en una especie de coleta inicial que se realiza con el pelo rizado a la que luego le vas añadiendo más volumen a base de repartir diferentes bucles con horquillas por toda la zona de alrededor, tapando de este modo lo que hoy lucimos siempre como zona de estirado y que es la que deberás seguir luciendo elijas el recogido que elijas.
Por si esta repartición de bucles no fuera suficiente aún hay quien culmina este moño ensortijando un poco más algunos mechones con la tenacilla, algo que te puedo decir que además de anticuado resulta incluso hortera y sólo te aportará un aire más cursi y artificial. No olvides que la estética de hoy en día está viviendo un auténtico auge hacia lo natural, por lo que un moño de estas características estaría catalogado como prohibido.