La piel de porcelana se puso de moda hace unos años ante el auge y boom de la cultura asiática, que se caracteriza por preferir las pieles impecables y blancas. Esto llevo a que la cosmética, como la coreana por ejemplo, viviera un auténtico boom en Occidente para conseguirla. Tener una piel de porcelana es el sueño de muchas personas, aunque ahora ya no se apuesta tanto por ese blanco extremo, sino por tener un aspecto saludable, una piel fina y suave y 100% libre de imperfecciones. Pero, si no tiene este cutis por naturaleza, ¿qué puede hacerse? Tranquilidad porque hay trucos de belleza y cosmética que son de gran ayuda para lograr el objetivo. Y si tienes una piel nada bronceada, puedes seguir estos consejos para mejorar su aspecto y estar todavía más radiante.
Productos
Para conseguir una piel de porcelana, entendida como un buen aspecto, es conveniente utilizar productos de tratamiento con color en lugar del maquillaje. Así se consigue un resultado más natural.
Entre las mejores opciones, están por ejemplo el suero coloreado, que se funde a la perfección con la piel, además de no tener una textura pesada, lo que también da una sensación y aspecto de ligereza.
Tonalidades
Además del producto, otra de las claves es fijarse en el color. En este caso, la mejor opción son los tonos ivory, que son muy claros porque quedan muy naturales y lo único que hacen es unificar el tono y mostrar un acabado mate totalmente perfecto.
Buen aspecto
Y, para ahondar más en ese tono de buen aspecto, hay que poner el foco en las mejillas para que tengan un aspecto sonrojado natural. Esto se consigue aplicando un poco de colorete en plena mejilla, pero no por debajo del pómulo, y hacia arriba de la misma. Además, hay que crear un pequeño círculo que luego se va difuminando.
Artículos relacionados:
– Consejos para preparar la piel para el maquillaje en mujeres maduras
– Los mejores productos naturales para cuidar la piel con la nieve y el frío