¿Conoces la criolipolisis? Es una de las técnicas más nuevas para eliminar las grasas sin cirugía. ¿Cómo? Inyectando rayos láser mediante una ventosa que succiona la grasa en la zona afectada y en frío. De esta manera, se destruyen las grasas hasta que se eliminan en su totalidad. El paciente las elimina cuando orina, aunque hace falta unos dos o tres meses para que se puedan advertir los cambios.
Este tratamiento puede aplicarse en el abdomen, cadera, rodillas y muslos y, aunque los precios varían dependiendo de la zona, el coste oscila entre los 500 y los 2000 euros aproximadamente. Sin embargo, como todas las técnicas tiene ventajas y desventajas. Conócelas a continuación.
Entre las ventajas, cabe destacar que no se corre ningún riesgo, ya que no es como una liposucción, es decir, no consiste en una cirugía. Con esta técnica, el organismo prácticamente no se toca y la grasa se elimina de una manera muy natural. Siguiendo en la misma línea, otra de sus ventajas es que no se utilizan agujas, no hay reacciones inflamatorias ni tampoco daños post operatorios. Además, se trata de un proceso ambulatorio que no reviste efectos secundarios.
Por otro lado, hay que tener en cuenta algunas advertencias. En primer lugar, no funciona para personas obesas, ya que la grasa que se elimina se hace en pequeñas cantidades y en un periodo de tiempo relativamente largo.
Por tanto, esta técnica es ideal para aquellas personas que tienen grasa localizada y que no pueden adelgazar mediante dieta o deporte físico. También debes saber que el número de sesiones dependerá de cada paciente, aunque lo normal es que se hagan entre una y tres.
¿Te atreves con la criolipolisis o prefieres la cirugía estética?