Ya sabes que en Maquilladas nos encanta contarte todos los secretos para mantenerte siempre bella. Por eso, hoy queremos hablar de la arcilla verde, que tiene una gran cantidad de propiedades. Las arcillas han sido uno de los componentes más usados en cosmética a lo largo de la historia. Éstas se crean a partir de la descomposición de las piedras debido a la acción de otros elementos naturales como el agua o el viento, logrando que el producto resultante obtenga una gran cantidad de oligoelementos y sales minerales.
Una de las arcillas más conocidas es la verde, que consigue aportar elasticidad y una reconfortante sensación de frescura a la piel. Además, es ideal para las pieles grasas o mixtas, ya que tienen un alto poder de absorción, ideal para regular el exceso de grasa. Por si fuera poco, es un método súper eficaz a la hora de combatir los puntos negros y el temido acné. La mejor manera de utilizarla es en forma de mascarilla pero, ¿sabes cómo hacerla?
Aunque existen productos de arcilla verde creados para aplicar directamente en la cara, tú misma puedes hacer tu propia mascarilla teniendo en cuenta una serie de consejos. En primer lugar, es necesario que nunca utilices materiales de metal para realizarla, ya que podrían deteriorar algunas de las propiedades de la arcilla. Lo más recomendable es que uses recipientes de barro, cristal o cerámica. Por otro lado, te aconsejamos que el agua sea de mineralización débil y, si puede ser, que esté libre de cloro. Si combinas la arcilla con té verde o aceites vegetales, los efectos serán todavía mayores.
¿Te animas a hacer tú misma la mascarilla de arcilla verde? ¡Te aseguramos que el resultado en tu piel será increíble!