Una piel seca puede tener un aspecto un tanto antiestético con el maquillaje si no sabemos cómo aplicarlo, y es que en este tipo de pieles es muy común encontrar escamaciones y rojeces que pueden no ser fáciles de ocultar.
De hecho, a menudo la falta de información hace que empeoremos la situación con el maquillaje. ¿Estás harta de que te ocurra esto? Toma nota de estos consejos y mejora tus resultados.
Para empezar debes lavar la cara con agua fría, nunca con jabón (que seca muchísimo la piel) y aplicar una crema hidratante específica para tu tipo de piel, que suelen ser aquellas untuosas o con aceites; el aceite de almendras suele ser el más recomendado para casos como el tuyo.
Nunca debes utilizar los cosméticos sin haber preparado el cutis para ello, pues tu tipo de piel debe estar muchísimo más protegida que el resto. De este modo, la base previa es completamente imprescindible para protegerte del contacto de los agentes químicos que de otra manera dañarían directamente tu piel.
Las mejores bases de maquillaje para tu piel serán las cremosas y de base líquida, pues los polvos compactos tienden a resecar más y a mostrar sin pudores los tradicionales signos de envejecimiento de tu piel (arrugas, por ejemplo). Fija la base con una pequeña cantidad de polvos traslúcidos.
En cuanto al resto de cosméticos es preferible que escojas aquellos con texturas cremosas, que ayuden a desviar un poco la atención de la sequedad de tu piel gracias a los brillos que los suelen caracterizar.
Finalmente, es muy importante que realices un cuidado continuo del cutis para como mínimo paliar los efectos que pueden tener los elementos externos sobre tu sensible piel. Realiza tratamientos exfoliantes, aplica mascarillas y no olvides el uso de cremas y sérums a diario.