Creo que muy pocas mujeres, por no decir ninguna, pueden presumir de levantarse con una cara perfectamente descansada y lista para salir a la calle. La mayoría de nosotras necesitamos de un poquito de luz y color que nos favorezcan y mejoren notablemente esa imagen. Y desde luego, esto incluye también a esas mujeres a las que no les gusta ir maquilladas o les da pereza arreglarse cada mañana.
En este sentido hay 2 puntos clave: uno de ellos es utilizar una crema con color o un maquillaje casi imperceptible, y el otro punto estará en usar siempre una barra de labios. La barra de labios es el verdadero imprescindible de todos los looks, edades, ocasiones y estilos de vida. Es tan favorecedora a nivel estético como necesaria a nivel salud, ya que aunque solo te decantes por un bálsamo labial, es muy importante que tus labios estén todo el día perfectamente hidratados. Esta necesidad aumenta en los meses de invierno, para impedir grietas.
Elegir la barra de labios más adecuada pasa por conocer la gran variedad que te ofrece el mercado cosmético. Solo así podrás encontrar la que mejor se adapte a ti y a tus necesidades. Existen barras líquidas que son casi permanentes: cuidadito con no abusar de ellas, tanto dura el color como sequedad aportan al labio. Además, siempre deberás desmaquillarte con productos específicos para evitar una dañina frotación. Si necesitas estar pintada mucho tiempo pásate a las de larga duración, adhieren muy bien el pigmento pero no deshidratan tanto.
Luego están las barras convencionales, pueden tener mayor o menor hidratación pero su duración es bastante limitada. Son las más recomendadas puesto que no dañan para nada la piel del labio. Eso sí, requieren de un continuo retoque, pero es algo a lo que te acostumbrarás. Un truquito para que te dure un poco más es poner algo de base de maquillaje en el labio.
Si te perfilas, también ayudarás a definir el contorno y evitarás que la barra se corra. Por último, están los gloss, muy de moda en la última década y que ya no se llevan tan brillantes ni mucho menos con purpurinas. Pero sí que es verdad que los hay más naturales y que te aportarán un suave tono muy favorecedor. Son los que menos duran.