Barras fijas, sombras líquidas, maquillaje y rímel resistentes al agua… un sinfín de productos con los que a diario nos bombardean en revistas y televisión para estar 24 horas con un aspecto impecable. La verdad es que cada vez se realizan fórmulas que permiten que los artículos que utilizamos para maquillarnos a diario tengan más fijación, y por tanto, mayor duración. De ahí a creernos que vamos a lucir un look perfecto de 8 de la mañana a 10 de la noche, después de comer, de saludar con un par de besos, etc., hay bastante diferencia. Si de verdad necesitas mantenerte maquillada por muchas horas es imprescindible que lleves en tu bolso artículos necesarios para cada retoque. No hace falta que llenes tu neceser de cosas innecesarias.
Lo que sí necesitas es un lápiz de ojos, una pequeña máscara y si tienes exceso de humedad en tus ojos, será suficiente con un juego de sombras. Para los labios, si usas barras fijas te vendrá bien un gloss o una barra transparente de hidratación, ya que este tipo de barras tiende a resecar el labio y, aparte de ser molesto, resulta antiestético. Si tu barra no es fija, no tendrás más remedio que llevarla siempre contigo.
Para el rostro, será suficiente con un colorete en tonos melocotón, podrás aplicar una fina capa por toda la cara a modo de maquillaje, y repetir más aplicaciones en la zona del pómulo. Una sola brocha te valdrá perfectamente para ambos usos. Clínex y algún bastoncillo de algodón siempre te ayudarán a limpiar imperfecciones, y no ocupan nada ni pesan. Además, el bastoncillo también te valdrá para aplicarte la sombra de ojos a modo de difuminador. Y por supuesto, un espejo. El espejo no puede faltar nunca en tu bolso. Tienes diseños monísimos que te permiten que el hecho de retocarte se convierta en todo un acto de coquetería.