Por fin ha llegado el día de Halloween, una fecha que cada año se celebra con más expectación en colegios, calles y locales. Son muchas las personas que se disfrazan para pasar la noche más terrorífica del año y poder disfrutar así de un ambiente único. Zombis, esqueletos, brujas y vampiros son algunos de los personajes que más éxito tienen, y todos ellos requieren un maquillaje específico y particular.
Hace unos días veíamos algunas ideas de maquillaje para Halloween, y ayer mismo hablábamos de cómo convertirte en La Novia Cadáver. Hoy hablaremos del antes y el después de este tipo de maquillajes, ya que no todo es fiesta, también hay que tener un poquito de precaución y darle a la piel los mejores productos y cuidados. Para ello es fundamental que compres todo lo que necesitas en sitios especializados, puesto que recurrir a artículos muy baratos puede repercutir negativamente en tu piel.
Antes de maquillarte, debes tener el rostro limpio y tonificado. Si quieres que el maquillaje te dure intacto toda la noche, puedes aplicarte un flash antes de comenzar, al igual que cuando te arreglas para una boda u otro evento especial. Lo que sí que es imprescindible es hidratar bien la piel antes de comenzar. Necesitas utilizar una buena dosis de crema y procurar que te nutra bien tanto el rostro como el resto de zonas que vayas a caracterizar. Date cuenta de que estos productos son extremadamente fuertes, y debes crear una barrera que evite que se obstruyan los poros.
Una vez la fiesta haya concluido, sé que solo tendrás ganas de meterte en la cama, pero antes deberás pasar por el baño. Límpiate la piel a conciencia antes de acostarte. Si es necesario cualquier día, imagínate con un maquillaje así. Si estás muy cansada, puedes retirar primero lo más gordo con toallitas desmaquillantes, pero luego deberás retirar todos los restos con leche, jabón o espuma limpiadora. Completa esa limpieza con abundante agua, tu piel te lo agradecerá. Al día siguiente, una mascarilla sería el mejor regalo para tu cutis, preferiblemente si es de arcilla, gracias a su poder astringente y limpiador.