Se acerca el verano. Nos queremos poner el bikini, minifaldas o shorts. Y, entonces, nos acordamos de algo que hemos olvidado durante el resto del año: la celulitis. Hoy repasamos algunos consejos sencillos pero que deben realizarse con asiduidad y constancia para conseguir que nuestras piernas y glúteos luzcan perfectos durante los meses estivales. No hay métodos infalibles, pero se pueden hacer cosas. Vamos a ver cuáles.
Ejercicios y masajes
De nada vale ponernos crema anticelulítica si no trabajamos la zona con algún ejercicio específico. Por eso, es importante que hagamos, por ejemplo, sentadillas, o si vamos al gimnasio podemos utilizar máquinas que hagan trabajar la parte inferior del cuerpo para tonificar piernas y glúteos. Igualmente, es muy bueno el trabajo aeróbico y cardiovascular, para ello ir a correr, salir en bicicleta, patinar… puede ayudar a reducir la grasa del cuerpo y, con ella, lograremos disimular la celulitis. De esta forma conseguiremos trabajar las toxinas y la capa de grasa que se acumula en estas zonas y lo haremos desde dentro. También se puede atacar la celulitis exteriormente. Un masaje es muy bueno para ello, con máquinas que existen para hacerlo, con rodillos o bandas que vibran, o nosotras mismas con las manos, pero haciéndolo bien. Al ejercer presión sobre la zona se moviliza la grasa y la toxinas; el masaje puede tener unos dos minutos de duración.
La hidratación
Tampoco es útil nada de lo anterior si no estás bien hidratada. El agua que consumes diariamente contribuirá a eliminar toxinas y a limpiar tu organismo desde dentro, retendrás menos líquidos y estarás menos hinchada. Y si, además, complementas todo esto con el uso tópico de cremas específicas, también será una ayuda extra. Eso sí, deberás ser constante y aplicarla como indica el fabricante, y masajeando bien la zona, no cuando te acuerdes o cuando ya veas que llega el momento de ir a la playa.