La miel, además de un alimento muy rico, es también un elemento natural excelente para multitud de tratamientos de belleza gracias a los nutrientes que tiene como las ceras, azúcares y minerales. Es un humectante natural excelente para reducir las irritaciones, así que es la aliada perfecta para las personas que tienen la piel sensible, además de ser muy buena también para el cabello. A continuación te detallo unos cuantos tratamientos de belleza con miel para que puedas hacerlos tú misma en casa:
– Mascarilla de miel: Pon miel en tu rostros directamente desde el bote y déjala que se seque durante un cuarto de hora. Cuando esté seca enjuágala con agua tibia hasta que la hayas quitado toda y notes que ya no tienes nada pegajoso en la cara.
– Tratamiento corporal: Ideal para humedecer, suavizar y darle brillo a toda tu piel. Llena una bañera con agua tibia y úntate miel por todo el cuerpo. Ve jugando con ella, extendiéndola y masajeando todo tu cuerpo mientras se va secando. Cuando comiences a notar que se pone muy pegajosa levántala un poquito para mejorar la circulación de los poros, y cuando se haya secado completamente métete en la bañera y relájate durante unos 15 minutos. Después enjuágate bien con el grifo de la ducha para que no te quede ningún resto. La piel te quedará muy suave, toda una experiencia.
– Baño de miel: Si no tienes mucho tiempo para hacer lo del consejo anterior, llena la bañera con agua tibia y añádele una taza de miel. Métete en ella y no le pongas ni jabón, ni sales ni ningún otro producto durante media hora. Con esto conseguirás que tu piel esté totalmente brillante y relajada.
– Exfoliante de miel: Mezcla en tu mano una cucharada de miel con un poquito de polvo de almendras dulces y aplícatela en tu rostro mediante pequeños círculos. Déjala durante cinco minutos y después enjuágate y ponte una crema humectante que sea ligera.
– Limpiador facial: Mezcla en tu mano una cucharadita de miel con un poco de leche en polvo y aplícatela en el rostro para eliminar impurezas y cualquier resto de maquillaje. Aclárate con agua tibia y ponte una crema ligera.
– Cabello brillante: Si quieres darle brillo a tu cabello mezcla una cucharada de miel, el jugo de un limón y un cuarto de litro de agua tibia. Lávate la cabeza con tu champú normal y después ponte la mezcla que has preparado. No enjuagues la miel, sécate y péinate como haces siempre. Conseguirás un brillo extra durante varios días.
– Acondicionador de miel: Mezcla media taza de miel con dos cucharadas de aceite de oliva. Aplícatela en el cabello y cúbrelo con un gorro de baño o una bolsa de plástico durante media hora. Después lávate la cabeza como haces normalmente.
Muy importante, que sepas que si tienes alergia a comer miel tampoco podrás hacer ninguno de estos tratamientos.