Los cepillos faciales eléctricos se están poniendo cada vez más de moda. De hecho, ya son muchas las firmas de cosméticos y de productos electrónicos que cuentan con su propio modelo: L’Oréal, Philips, Olay, Clinque…
Como suele ocurrir con este tipo de productos, son muchas las personas que se preguntan si realmente valen la pena. Pues bien, hoy en Maquilladas queremos responderte a esta pregunta, así que si estás pensando en comprarte este producto, no dudes en echarle un vistazo a lo que viene a continuación. Posiblemente después de leer lo que te contamos tengas clara tu decisión.
Qué prometen los cepillos faciales sónicos
Los cepillos faciales eléctricos son unos aparatos que rotan y vibran con el objetivo de eliminar todos los residuos superficiales del rostro. Las marcas que comercializan estos productos suelen prometer un montón de beneficios: una limpieza en profundidad, reducción de los poros, disminución de las arrugas, un aspecto menos apagado, acabar con la grasa, mejorar la piel seca… Sin embargo, parece ser que no siempre se consiguen los resultados prometidos.
Prácticamente igual que la limpieza manual
Aunque los nuevos dispositivos electrónicos creados para la limpieza del rostro prometen una mejora de la piel en todos los sentidos, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha realizado un estudio que revela que prácticamente no existe diferencia entre la limpieza de rostro tradicional y la que ofrecen estos aparatos. Así, desde la OCU aseguran que estos productos son demasiado caros para lo que verdaderamente ofrecen.
¿Qué harás después de saber la opinión de la OCU sobre uno de los productos de higiene facial que está más de moda en estos momentos? ¿Te harás con él o seguirás optando por la clásica limpieza facial del rostro?
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