Los productos de maquillaje son aliados de belleza. Sin embargo, también es posible cometer errores como aquellos gestos que suman años o pueden interferir en el cuidado de la piel. A continuación, presentamos seis ejemplos.
1. Base de maquillaje que no se ajusta al tono de piel
Cuando existe una diferencia significativa entre ambos planos, el look final no logra su mejor versión. Sencillamente, es recomendable elegir un producto que aporta un acabado uniforme y natural.
2. Exceso de colorete
Otro de los errores de maquillaje que conviene evitar en el día a día es aquel que se alinea con un exceso de colorete. Es un contraste que puede romper la armonía final del rostro. Y, además, es un gesto que suele sumar años a partir de los 30. Es decir, aporta un aspecto más envejecido.
3. Utilizar muchos tonos para enmarcar la mirada
Al igual que ocurre en el ámbito de la moda, la belleza de los colores es clave en el universo del maquillaje. Es posible jugar con varios colores diferentes para enmarcar una mirada bonita. Sin embargo, es recomendable no sumar demasiadas tonalidades a la combinación final en la rutina diaria.
4. Elegir una propuesta únicamente porque es tendencia
Algunos de los criterios que utilizas para sacar partido a tu fondo de armario, también puedes utilizarlos para realzar tu maquillaje. Al igual que ocurre en la moda, no todas las prendas o diseños que se convierten en tendencia se adaptan a cada mujer. Por esta razón, aunque un maquillaje triunfe en un momento determinado, no lo utilices si no te sientes identificada con esa propuesta porque consideras que no te favorece.
5. Dormir con el maquillaje puesto
Más allá del cansancio que puedes experimentar a partir del ritmo de una rutina muy exigente, nunca hay que dormir con el maquillaje puesto. Ese hecho daña la piel y potencia el envejecimiento.
6. No poner atención en el conjunto del rostro
Otro error habitual es dedicar mucho tiempo al cuidado de una zona concreta y relativizar la importancia de otro punto de la cara. Por ejemplo, las cejas (esta parte enmarca la mirada).