Imaginamos que a estas alturas ya te habrás dado cuenta de que cuidarse no es una tarea del todo económica. Y es que algunos cosméticos pueden llegar a ser demasiado caros. Afortunadamente, aún podemos contar con los trucos y los secretos de nuestras abuelas para mantenernos bellas el mayor tiempo posible.
Uno de ellos es el uso de la vaselina que, además de servir para curar los labios agrietados, tiene un sinfín de aplicaciones. De hecho, Jennifer Aniston confesó en una ocasión que utilizaba este derivado del petróleo a modo de contorno de ojos para hidratar el máximo esa zona e impedir la aparición de arrugas. ¡Pero aún hay muchos más usos! ¿Quieres conocerlos?
Puntas abiertas y piel seca
Aunque no lo creas, la vaselina es una gran solución para las puntas abiertas. Solo tendrás que aplicar un poco sobre la zona antes de lavarte el pelo. Este producto también es genial para hidratar tu piel al salir de la ducha favoreciendo su suavidad y su tersura y, además, es ideal para cuidar las pieles secas, sobre todo los codos, rodillas u otras zonas ásperas de tu cuerpo.
Como exfoliante y desmaquillante
La vaselina también te servirá como ingrediente para hacer un exfoliante casero. Para conseguirlo tendrás que mezclarla con un poco de sal o azúcar y extenderla por la cara o el cuerpo. Y, aunque suene muy raro, también puede servir como desmaquillante, colocando una pequeña cantidad de vaselina liquida sobre un algodón y extendiendo el producto por el rostro y el cuello. Después solo tendrás que aclarar tu cara y aplicar tu crema habitual.
Para manos, pestañas y cejas
Por otro lado, la vaselina puede servirte para mantener tus manos menos ásperas y secas y como esmalte para que tus uñas estén brillantes y sanas, además de más resistentes. Por si fuera poco, puede servir para dar cuerpo a las cejas y para mantener tus pestañas fuertes e hidratadas si te aplicas el producto antes de dormir.