Manicura magnética, uñas dibujadas con un imán

En los últimos tiempos el nail art se ha convertido en algo habitual. Diferentes maneras de decorar las uñas y todas ellas con métodos que no siempre conseguimos realizarnos en casa. Resultados profesionales que ahora se presentan como algo sencillo que podrás hacerte tú misma. Esto es lo que podrás comprobar hoy cuando veas en qué consiste la manicura magnética, una técnica que te permite crear dibujos en las uñas con un imán.

Para hacerte la manicura magnética necesitas adquirir un kit especial que podrás encontrar en varias firmas. En él encontrarás un barniz con partículas imantadas y un imán que tiene las muescas de lo que será el dibujo final. La mayoría de estos imanes son rayados, y según lo utilices te quedarán líneas horizontales, verticales o diagonales. Actualmente empiezan a fabricarse con otros diseños.

Para empezar, es conveniente que tengas la manicura recién hecha, sin pellejitos y con todas las uñas limadas con la misma forma y longitud. Empezarás aplicando una base protectora tal y como debe hacerse siempre antes de pintar las uñas. Ponla en todos los dedos y luego pasa a pintarte con el barniz. Aquí es donde empiezan las diferencias con otras lacas de uñas. La manicura magnética se hace uña a uña, para impedir que se seque.

El barniz magnético es bastante denso y necesitas aplicar una sola capa bastante gordita, que te cubra como si te hubieras dado dos pasadas. En cuanto tengas una uña completamente pintada, deberás acercar el imán lo máximo posible, como si lo acostaras sobre la uña, pero dejando una distancia de un par de milímetros para que no chafe la pintura. Esperarás unos 20 segundo antes de retirar el imán, cuando lo quites la uña ya se mostrará a rayas. Termina aplicando el top coat, que te ayudará a darles más brillo y a que te duren más tiempo.