Aunque muchas de nosotras nos ponemos manos a la obra con los tratamientos anticelulíticos cuando el problema ya se nos ha echado encima, lo cierto es que combatirla es también cuestión de saber luchar contra los factores que la provocan.
De este modo, tomar algunos buenos hábitos sin olvidarte de los productos cosméticos puede ser la solución de que el problema comience a minimizarse.
Acostúmbrate a seguir estos hábitos en tu día a día y pronto comenzarás a notar los cambios:
– Actividad: Mantén tu cuerpo en activo evitando estar demasiadas horas sentada, pues sin duda esto hará que la sangre no circule correctamente. También es importante que hagas ejercicio varias veces a la semana (tantas como puedas) para eliminar el exceso de grasa en el cuerpo.
– Productos: Aplica tus cremas anticelulíticas tras la ducha con la piel limpia y seca. Aunque dependerá de tu tipo de celulitis, los masajes suelen hacerse con masajes circulares o de abajo hacia arriba.
– A evitar: La ropa ajustada, los tacones, las pastillas anticonceptivas y las malas posturas al sentarte.
– Sal y azúcar: Debes reducir el consumo de estos alimentos, pues mientras la sal es uno de los responsables de la retención de líquidos el azúcar y las grasas potencian la aparición de toxinas.
– Café y tabaco: Ambas son vasoconstrictoras, lo que significa que reducen cantidad de sangre que se distribuye por el cuerpo y los tejidos haciendo que no les llegue suficiente oxígeno.
– Alcohol: Favorece la retención de líquidos y es muy calórico.
– Agua: debes beber unos dos litros agua, pues esto hará que orines más y elimines líquidos causantes de la celulitis.
Sé constante y lucha contra el problema, ¡recuerda que Roma no se construyó en un día!