Noche mágica en Los Ángeles, pues fue allí, en el Teatro Kodak, donde se acogió la 84ª edición de los premios Oscar. Esta edición fue muy especial ya que rendía homenaje a los grandes artistas de mediados del siglo pasado, entre ellos la mítica e inolvidable Marilyn Monroe. Precisamente la película “Mi semana con Marilyn” optaba a uno de los premios, concretamente al de mejor actriz, gracias a la maravillosa interpretación de Michelle Williams. Galardón que no ganó puesto que fue a parar a manos de la gran Meryl Streep, por su papel en “La dama de Hierro”.
Con un impresionante vestido rojo de Louis Vuitton, Michelle recibió muy buenas críticas a su estilismo. Particularmente celebro que un look tan fresco y natural como el suyo haya gustado tanto como gustó. Hay que tener en cuenta que, por lo general, la mayoría de actrices nominadas o invitadas a la Alfombra Roja más famosa del mundo, lucen largas melenas o espectaculares peinados. En este caso, Michelle cautivó con su pelito corto, que le daba un aire muy moderno, inocente y juvenil.
Este look es una versión aún más recortada del Twiggy, el corte de pelo más moderno en 2011 y que sigue llevándose muchísimo aún este año. Una moda a la que Michelle ya se apuntó por aquel entonces y que sigue luciendo de un modo espectacular. Un ejemplo en toda regla de cómo un pelo cortito puede ser tan femenino y atractivo como la más bonita de las melenas o el recogido más espectacular. Su tono de piel y de pelo juegan un papel muy importante en el resultado final, así como la dulzura de sus gestos.
Por su parte, el maquillaje de Michelle también siguió la moda nude, que fue la elegida por la mayoría de las asistentes a la gala. Piel muy clara y respetando el global del rostro, al que apenas se le subió un poquito de tono con un ligero rubor rosáceo. Raya mínima en los ojos, y un ligero toque de rímel, más encargado de alargar que de dar volumen. El color lo aportaban sus labios, para los que eligió un bonito grosella medio muy favorecedor. Muestro un primer plano en el que se puede apreciar un perfecto perfilado. Muy bien.