Los ojos son una de las partes clave del rostro. Es habitual que capte todas las miradas, sobre todo, cuando la mirada es magnética. Si no se tiene de forma natural, el maquillaje es de gran ayuda para añadir ese magnetismo o bien acentuarlo. Con trucos sencillos es posible conseguir este efecto con el que no habrá excusas para que no miren a los ojos. ¿Cómo se hace? Toma buena nota de estos consejos.
Delineado
Una de las claves para una mirada magnética es el perfilado de los ojos. En esta ocasión, se requiere que sea muy intenso. Para conseguirlo, tan solo hay que hacer el trazo de la raya con un lápiz kajal o khol justo a ras de las pestañas. A continuación, se debe difuminarlo con la ayuda de un pincel.
Es importante que este paso se haga poco a poco. En caso contrario, va a costar más y, probablemente, no se logrará el efecto deseado porque el lápiz se habrá secado y no se podrá difuminar bien.
Este mismo proceso se tiene que hacer con la parte de abajo del ojo. Además, el toque final en este parte del maquillaje para ganar en magnetismo en la mirada se logra con el delineado de las líneas de agua por dentro. Este perfilado hay que hacerlo tanto en el párpado superior como en el inferior.
Luminosidad
Otro paso clave en este tipo de maquillaje es la luminosidad. Esto se consigue aportando un toque de luz. Tan solo hay que aplicar una sombra de ojos en tono tierra mate en la cuenca del ojo con el fin de crear profundidad en la mirada.
También es fundamental extender en el párpado móvil una sombra topper dorada. Con ambos colores se logra dar color a la mirada de forma discreta mientas se generan unos destellos discretos, pero elegantes, que no pasan desapercibidos.
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