El chocolate es uno de los alimentos más deliciosos del mundo, un auténtico vicio para muchas que ya no pueden vivir sin una dosis mínima del dulce y exquisito cacao.
Pero el chocolate no solamente es un placer para todos los sentidos sino que además puede resultar muy beneficioso en lo que al ámbito de la belleza se refiere… ¿Habías pensado sustituir el hábito de comerlo por utilizarlo para tu piel o tu cabello, por ejemplo?
Si no tenías ni idea de las propiedades de este alimento atiende, porque te dejamos una pequeña guía con algunas de las principales.
Hidratante, tonificador, anti-grasa, potenciador de la circulación sanguínea y linfática… Aplicado de modo externo sobre el cuerpo mediante suaves masajes, el chocolate es ideal para mejorar tu aspecto:
– Piel perfecta: Sus propiedades exfoliantes, hidratantes y vigorizantes ayudarán a mantener tu piel perfectamente nutrida y humectada, por lo que si tienes problemas de sequedad una buena crema cosmética o mascarilla casera a base de manteca de cacao será fenomenal. Puedes utilizarla sobre todo el cuerpo.
– Anti-envejecimiento: Los antioxidantes y aminoácidos esenciales del chocolate sirven para conseguir un efecto tensor en la piel y ayudan a frenar la aparición de arrugas y el envejecimiento prematuro. No obstante, es recomendable consultar con un experto si este tratamiento será adecuado para tu tipo de piel.
– Anti-celulítico: Contiene polifenoles de la familia de los flavonoides, que no solo son capaces de reducir la inflamación de los vasos sanguíneos sino que además mejoran la circulación devolviendo así la firmeza a la piel y mejorando el aspecto de la piel de naranja.
Por si no fuera suficiente, el chocolate también es un excelente aliado para el sistema nervioso en tanto que actúa como anti-depresivo y anti-ansiedad y mejora el humor de quienes lo ingieren.