Cuando hablamos de signos de envejecimiento, la mayoría de las personas lo relacionan directamente con las arrugas y líneas de expresión. Cierto es que son las características más notorias del paso del tiempo, pero hay otras a tener en cuenta, como la flacidez. De poco sirve tener un rostro liso y terso si sus contornos y el cuello delatan la verdadera edad, aún más, este efecto no resulta nada natural.
Lo importante en estética es conseguir una imagen armoniosa, por este motivo cada vez son más variadas y novedosas las técnicas médico-estéticas que te ayudarán a conseguirlo. Hace unos días te hablaba de los buenos resultados que te ofrece un tratamiento que consiste en definir el óvalo facial con ácido hialurónico. Este método consigue que todo tu rostro ofrezca una imagen completamente simétrica, algo que siempre contribuye a aumentar tu atractivo.
Hoy te hablaré de un revolucionario método contra la flacidez de cara y cuello, los hilos de sustentación. Este tratamiento consiste en la implantación subcutánea de hilos que permiten tirar de la piel caída. Un sistema que logra reposicionar en un nivel más alto los tejidos que se habían desplazado de modo descendente. Esta técnica ofrece unos resultados muy naturales, ya que el hilito no es perceptible y ejerce una presión inversa a la ley de gravedad. La vida útil de estos hilos oscila alrededor de los 2 años, por lo que no necesitarás constantes visitas a la clínica para realizarte retoques.
Los hilos de sustentación pueden tener autoanclaje o anclaje directo en la zona caída, de este modo se pueden ir implantando en el punto exacto que se necesita para iniciar a tirar de los tejidos, impidiendo así desplazamientos que pudieran dar una imagen artificial. Un método revolucionario que no es aún muy conocido pero cuyos resultados son muy satisfactorios , por lo que poco a poco nos iremos familiarizando con él al igual que ha ocurrido con otro tipo de tratamientos.