El eyeliner es uno de los cosméticos que sigue estando de moda. Sin embargo, no siempre es fácil lucirlo. De hecho, es uno de los productos con los que hay que tener mucho cuidado al utilizarlos porque se puede caer en el error de parecer mucho mayor. Sin embargo, esto puede evitarse fácilmente con unos trucos y consejos de maquillaje con los que, incluso, se puede llegar a parecer más joven.
Trucos
Al usar el eyeliner, una de las primeras pautas que hay que tener claras es que no es conveniente pasarse con este cosmético. En este caso, sobre todo cuando ya se han superado los 30 años, una buena máxima es que menos es más.
La mirada siempre debe quedar limpia. Para ello, es importante hacer un trazo muy fino a ras de las pestañas. Así, simplemente quedan enmarcados los ojos, lo que hará que se parezca mucho más joven.
Es un efecto que, incluso, se puede conseguir sin eyeliner. Solo se tiene que utilizar un lápiz marrón o negro para delinear los ojos en la línea interior del párpado de arriba y en las pestañas inferiores. El maquillaje se completa con unos trazos de sombra clara en los párpados para iluminar.
Además, si se quiere hacer los ojos más grandes, un buen truco es incidir con la máscara de pestañas en la parte que va desde la mitad hacia el exterior. Y, si las cejas son demasiado finas, opta por engrosarlas un poco porque es un efecto que también rejuvenece.
Resto del rostro
Para parecer más joven, el resto del maquillaje tiene que ser muy sutil. No hay que olvidar que el foco de atención se ha puesto en los ojos. Una buena opción es elegir un labial en tonos anaranjados, casi coral, porque es uno de los más favorecedores que hay.
En general, sienta bien a todas las mujeres con independencia de que se tenga la piel clara u oscura. Además, también aporta un toque de frescor al rostro.
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