El invierno, las fiestas, las tendencias… En este tiempo casi todo nos lleva inevitablemente a utilizar las sombras de ojos oscuras en nuestro maquillaje, que aunque suelen aportar un aspecto elegante y sofisticado pueden no ser favorecedoras para todo tipo de mujeres.
Las sombras de ojos de tonos negros o gris son las más comunes entre las sombras oscuras, y aunque no se puede negar que quedan ideales para la noche, debes saber cuándo no debes aplicarlas en función de tus propias características y del momento.
Para empezar, ya sabemos que este maquillaje queda perfecto en las ocasiones especiales o para salir las noches de invierno, pero para el día a día debemos eliminarlo radicalmente de la lista de looks ya que quedaríamos fuera de lugar. Si te gusta o consideras que te favorece, procura aplicar tonos bastante claros dentro de la gama de grises oscuros.
Este tipo de sombras contribuyen a crear más profundidad en el ojo, lo que en el fondo no significa otra cosa que hacerlos más pequeños. Por eso es muy conveniente que las evites si tus ojos o tu párpado fijo son pequeños, puesto que lo único que conseguirías es empequeñecerlos todavía más y quitarles vida; prueba con tonos más claros y luminosos o con otros oscuros más naturales como los marrones más opacos, que suelen sentar bien a casi todas las chicas.
Del mismo modo, debes ser cuidadosa a la hora de aplicar el eye liner o el lápiz delineador. Si eres de ojos pequeños, debes evitar la raya negra sobre las pestañas inferiores, si bien serán perfectos para ti los delineadores claros como el color hueso o vainilla.
Tampoco son nada favorecedoras para las mujeres con los ojos demasiado juntos; si aún así no puedes resistirte a llevar este look aplica la sombra a partir de unos milímetros del lagrimal, no llegando a él y combinándolo en esta zona con alguna sombra más luminosa.
Personalmente, no las recomiendo a las chicas con las pieles más blancas si no es con el objetivo de conseguir un aspecto más misterioso, pues generalmente hacen que el resto del rostro se vea todavía más pálido.