¿Has oído hablar del chroming? Pues deberías, ya que se trata de una de las técnicas de maquillaje que más éxito está teniendo últimamente. Eso sí, es importante que tengas en cuenta que no se trata de una técnica nueva, sino que se habla de ella desde hace ya muchos meses.
Para quién no lo sepa, el chroming consiste en iluminar algunos puntos del rostro con el objetivo de que las facciones parezcan más marcadas. ¿Quieres saber más sobre esta tendencia? ¡Pues te recomendamos que no te pierdas nada de lo que te contamos a continuación!
Pintalabios nude, el elemento imprescindible
Tal y como nos explican desde L’Oréal París, el cosmético imprescindible para poner en práctica el chroming es el pintalabios nude de acabado nacarado o brillante. Lo ideal es escoger un labial de textura cremosa para poder disimularlo bien sobre la piel. Aunque en el mercado podrás encontrar una gran cantidad de pintalabios de este tipo, ya que es el color del momento, la marca nos recomienda Color Riche clásico en el tono 631 o en el tono 303 para pieles claras.
En qué consiste el chroming
Una vez hayas escogido el pintalabios, deberás aplicarlo directamente en la zona alta de los pómulos, en los párpados y en el arco inferior de las cejas. Es importante que difumines el producto con la yema de los dedos para que el calor corporal caliente el producto y sea más fácil de extender. Por otra parte, debes saber que es más recomendable llevar a cabo esta técnica sobre bases de maquillaje fluidas o en crema y que es mejor no aplicar ningún producto después.
En pieles grasas o mixtas
Por último, queremos recomendarte que evites esta técnica si tienes la piel grasa o mixta, ya que lo único que conseguirás es acentuar los brillos en tu cara.