Hay mujeres que tienen celulitis y otras que no, pero hay algo de lo que ninguna podemos escapar: la flacidez que nuestro cuerpo va mostrando con el paso del tiempo. Lo que sí está a nuestro alcance es la posibilidad de prolongar unos añitos más la apariencia firme y turgente. Para ello debemos aplicar correctamente los reafirmantes corporales en cada parte del cuerpo:
– Vientre: esta zona del cuerpo absorbe muy fácilmente las cremas densas y los aceites. Irán bien aquéllos regeneradores que contengan rosa mosqueta o granada. Aplícalos con la palma de la mano, realizando un masaje circular alrededor del ombligo siguiendo el sentido de las agujas del reloj. Combina este movimiento con pequeños pellizqueos que realizarás con las yemas de los dedos por toda la zona. Estos toques activan la circulación de la sangre, favoreciendo la penetración de los activos, por lo que la eficacia del producto se verá aumentada.
– Brazos: el paso del tiempo y la falta de ejercicio se pronuncia especialmente en la cara interna de los brazos. Disminuir el efecto que producen las denominadas “alas de murciélago” es una de las tareas más difíciles en estética. Conviene aplicar cremas reafirmantes a diario y ayudarlas con un masaje ascendente que vaya desde el codo hasta la axila. Aún así, es imprescindible hacer algo de pesas y contracciones musculares todos los días.
– Piernas: las zonas más propensas a vislumbrar flacidez en las piernas son los muslos (especialmente la cara interna) y las rodillas. La forma correcta de aplicar las cremas sería con un masaje ascendente que irá desde la articulación hasta la ingle. La zona interna la completarás con pellizqueos y palmoteos. Te vendrá muy bien un chorrito de agua fría en la ducha y que exfolies semanalmente esta zona. Eliminar las células muertas disminuye la piel de naranja, que es la que da mayor aspecto de flacidez.