Con el verano, es normal que el cabello acabe estando apagado, debilitado y quebradizo. La culpa la tienen el sol, el cloro, la sal del mar, las planchas y el secador, entre otros muchos factores. Eso sí, aunque es más común que el cabello se estropee durante esta época del año, puede dañarse en cualquier estación.
Solemos creer que la mejor solución para reparar un cabello dañado es cortar por lo sano. Sin embargo, aunque esta no es una mala opción, también existen otras alternativas que deberás barajar dependiendo del estado de tu melena. Hoy en Maquilladas queremos explicarte cuándo es necesario cortar y qué alternativas tienes a las tijeras. ¿Te apetece acompañarnos?
Puntas abiertas
¿Tienes las puntas abiertas? ¡Entonces no hay más remedio que cortar por lo sano! Y es que una vez que la fibra se ha dividido en dos, no hay marcha atrás. Eso sí, si solo están secas, también puedes optar por otras alternativas, como nutrirlas con un serum. Además, es recomendable que las cortes cada tres meses, aunque solo sea un centímetro.
Toda la melena dañada
Si tu melena está completamente dañada, entonces cortar las puntas no servirá de nada. En este caso, lo mejor es que vayas a tu peluquero para que te aplique algún tratamiento a base de queratina. Por supuesto, también son muy prácticas las mascarillas nutritivas, que deberás comprar dependiendo de tu tipo de cabello. Eso sí, procura centrarte en los medios y en las puntas y nunca aplicarla en la raíz.
Cómo saber si tu cabello está estropeado
Si no tienes claro si tu melena está o no estropeada, lo que te recomendamos es que sujetes un cabello con los dedos y estires de las extremidades. De esta manera, podrás comprobar si es o no flexible. Además, debes saber que otra señal de un pelo estropeado es que tienda a enredarse.