Ya sabemos que las manos forman gran parte de tu imagen y que seas más o menos expresiva a la hora de hablar son una parte del cuerpo siempre visible y, sobre todo, destaca mucho más si no llevas las uñas arregladas. Hacerse la manicura es algo que no a todo el mundo le gusta, bien sea por pereza o por falta de tiempo, a todas nos gustaría que sus resultados nos durasen un poquito más. Esto es posible si dedicas un minutito a otros cuidados que te ayudarán a prolongar el buen estado de tu manicura.
En primer lugar, es importante que utilices todos los productos y útiles adecuados para cada fin. Empieza por elegir un quitaesmalte que no contenga acetona, de este modo, la uña estará siempre hidrata, y la piel del contorno se resecará mucho menos. Evita cortar mucha piel en la cutícula, pues crecerá más y más pronto si te excedes de la imprescindible. Puedes mantener las cutículas suaves aplicando crema todos los días, así, evitarás cortarlas y sólo tendrás que empujarlas suavemente, eso sí, utiliza un palito de naranjo, el metal daña la uña, ya que arrastra capas imperceptibles que son fundamentales.
Si además de cutículas necesitas quitar algo de piel en los laterales de la uña, es preferible que te acostumbres a limar esas pequeñas durezas con una lima gruesa de cartón, de este modo, usarás mucho menos el alicate. Hay firmas que venden tratamientos para uñas que incluyen semillitas de fresa, es ideal para aplicar en estos laterales a modo de peeling y notarás como la zona queda prácticamente igualada. Para pintar las uñas, es muy importante que apliques los productos de cada paso. A veces damos color sin poner antes la base para acabar antes, esta mala costumbre sólo logrará que tu uña se debilite y que el esmalte dure menos tiempo. Al final, verás que si te paras un poquito en el arreglo de las uñas, necesitarás menos mantenimiento y conseguirás que la manicura te dure más tiempo.