Cuando llega la primavera todas nos ponemos las pilas en el cuidado de nuestras manos y uñas, a pesar de que es algo que tendríamos que tener en cuenta durante todo el año. La manos son nuestra seña de identidad, así que las uñas deberían estar siempre perfectas.
Una de las opciones a las que muchas recurrimos es a las uñas postizas, ya sean de gel, acrílicas o de porcelana. El otro día te comentamos sus ventajas e inconvenientes, pero hoy queremos ir un poquito más allá y hablarte de los riesgos que pueden esconder estos elementos estéticos, que según los dermatólogos, pueden provocar graves riesgos para la salud. ¿Quieres saber que riesgos se esconden tras las uñas postizas?
Peligros de las uñas postizas
Está claro que las uñas postizas ofrecen una belleza a las manos indiscutible. Sin embargo, diferentes estudios dermatológicos, provenientes de la Academia Estadounidense de Dermatología, aseguran que también esconde una serie de riesgos.
Por ejemplo, su posible contenido de Metil Metacrilato, una sustancia prohibida en Estados Unidos, que puede encontrarse en locales donde ponen uñas postizas a precios muy bajos. Según un informe de la Asociación Internacional de Técnicos de Uñas, el uso prolongado de esta sustancia puede provocar alergias de la piel, pérdida en las yemas de los dedos e, incluso, pérdida permanente del cuerpo de la uña.
Además, según algunos dermatólogos, la uña pierde dureza tras la utilización de las postizas y durante su colocación, cuando los profesionales utilizan duras limas para aportar a las uñas la forma adecuada y la luz ultravioleta para secarlas, pudiendo favorecer a un futuro cáncer de piel.
Esmaltes de uñas permanentes
Por otro lado, tampoco son recomendables los esmaltes de uñas permanentes, ya que pueden ocultar problemas internos de la uñas que irán empeorando sin que ni si quiera nos demos cuenta.