El maquillaje es un buen aliado para lucir un rostro resplandeciente, pero también puede ser el peor enemigo de una persona si no se aplica adecuadamente. Y es que no siempre se acierta con los productos que se emplean, con su utilización o con los tonos que se eligen. Son algunos de los principales errores que, estéticamente, pueden salir muy caros porque un mal maquillaje hace parecer mucho más mayor de lo que se es. Y, ¿cuáles son estos errores? Aquí te contamos los tres que debes evitar siempre y, sobre todo, si ya pasas de los 30 años.
Base
El primer error es elegir mal una base de maquillaje y, en concreto, su color. Un tono más claro hará parecer la piel más pálida y plana mientras que, si es más oscura, aportará pesadez al rostro. Para evitarlo, siempre se debe probar en zonas como el mentón o el pecho.
Colorete
El blush es otro de los productos con los que se cometen muchos errores en maquillaje. Y es que no hay que ponerse ni mucho colorete ni hacerlo demasiado debajo de las mejillas porque parecerá que se tienen los pómulos caídos o descolgados.
Lo mejor es sonreír frente al espejo y aplicar el blush en la parte más elevada. Además, para evitar problemas, elige tonos rosados para el invierno porque la piel del rostro está más clara al no broncearse.
Labios
La elección de la barra de labios puede parecer sencilla, pero no lo es tanto. Además, una mala selección puede ser fatal. Y es que los labiales demasiado oscuros hacen que los labios se vean más pequeños y con menos volumen.
Una buena opción para no equivocarse es elegir labiales nude o tonos rosas o melocotón, que son mucho más juveniles. Aparte, no es conveniente aplicar barras de labios mates porque restan luminosidad.
Siempre es preferible aplicar colores que tengan algo de brillo y que sean más hidratantes para que la boca parezca mucho más jugosa, joven y con más volumen.
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