Tipos de protectores térmicos

El secador y la plancha son ya imprescindibles en el ritual de belleza de la mayoría de mujeres, y es que pocas se libran de tener que utilizarlos para lucir un cabello bonito y arreglado.

Sin embargo, sabemos de lejos que un uso excesivo de ellos puede perjudicar gravemente la salud de nuestro cabello haciendo que se seque, que pierda brillo y resistencia y que aparezca en él el odiado efecto frizz en el cabello.

Sabiéndolo, lo mínimo que podemos hacer es remediar los daños que el calor puede causarnos protegiéndolo de él. Para ello lo mejor es utilizar protectores térmicos, unos productos muy conocidos por algunas pero un mundo nuevo para muchas otras. ¿Quieres saber un poco más de ellos antes de ir a comprarlo a tu perfumería? Presta atención y decídete por el tuyo.

Existen tres tipos de protectores: en spray, en crema y en espuma. Todos ellos tienen una eficacia similar, si bien puede variar su efecto en función de los ingredientes y de tu tipo de cabello:

– Si tienes el cabello fino y liso es preciso que utilices sprays, pues su forma de extenderse hace que las partículas lleguen y sean absorbidas más rápidamente por el cabello. Además, una crema, por ejemplo, podría engrasarte demasiado el pelo.

– Las melenas gruesas y rizadas son las que mejor aceptan los protectores en crema, pues ayudará a que el pelo no se encrespe llegando desde la raíz hasta las puntas y dotando también a éstas de la hidratación que necesitan.

– Finalmente, las espumas son el protector ideal para las personas con el cabello mixto, es decir, con un cuero cabelludo más bien graso y las puntas secas y encrespadas. Como el cuero cabelludo ya produce suficiente sebo, sólo debes aplicar la espuma a partir de la media melena aproximadamente, nunca cerca del cuero cabelludo.