Aunque hace ya muchos años que se dedica al mundo del cine, la actriz de origen ucraniano Mila Kunis saltó al estrellato tras coprotagonizar el pasado año el gran éxito ‘El Cisne Negro’ como antagonista de Natalie Portman.
Es innegable que sus grandes cualidades artísticas la han llevado a conseguir la fama, pero también lo es el hecho de que no hubiese sido igual de no ser por esa gran belleza que la caracteriza aderezada (como siempre) por una buena dosis de maquillaje.
Si quieres aprender a maquillarte como ella… ¡Coge papel y boli!
Las dulces facciones de Mila contrastan con unos exóticos y prominentes rasgos que le dan ese aspecto romántico y sexy a la vez: potenciar ambos aspectos es precisamente la clave del éxito de su maquillaje.
En este sentido, Mila apuesta siempre por las tonalidades naturales que más favorecen a su piel utilizando una base de su mismo tono, correctores para disimular esas ojeras que a veces asoman en su rostro y algún que otro iluminador para potenciar sus puntos fuertes.
Sus enormes y rasgados ojos de gato son los que siempre toman el protagonismo de su maquillaje, y es que son el rasgo más destacable de la actriz: para destacar su color y sus preciosas formas nada mejor que las sombras claras o nude para el párpado superior y el lagrimal y las marrones más oscuras para el móvil. Con este último no solo consigue destacar el verde de sus ojos sino que además consigue un poco de profundidad para sus ojos algo saltones.
Mila remata siempre su maquillaje de ojos con una raya de perfilador sobre la línea de las pestañas superiores e inferiores y una buena máscara de pestañas.
Es en mejillas y labios donde la actriz apuesta por lo más natural: el blush rosado y los labiales nude, rosados o los gloss transparentes no faltan en su neceser.