Pocas cosas hay peores que un maquillaje con efecto máscara. Es uno de los errores más habituales que se cometen pero también uno de los que más fácil solución tienen, y es que con los consejos que te damos en el artículo de hoy vas a poder lucir un rostro perfecto, unificado y natural, sin que se note diferencia entre tu cara, el cuello y el escote.
Eso sucede porque no estás difuminando bien tus productos, sobre todo en esas áreas límite que diferencian unas zonas de otras. Un rostro maquillado no termina en la barbilla. Es imprescindible que continúes hacia el cuello y hacia el escote ya que así el tono se unificará en todas las partes visibles y no quedará relegado solo a la cara, apareciendo antiestéticos contrastes con el resto. Vamos a ver cómo evitarlo y lograr un aspecto bello gracias a tu maquillaje.
Extender bien el producto
Como te comento, si no extiendes y difuminas bien el producto, sobre todo en el límite con las orejas, cabello y mandíbula, tu rostro lucirá ese aspecto de máscara que es precisamente el que queremos evitar. Para conseguirlo tienes que aplicar tu base o polvos en estas áreas que a veces olvidamos y difuminar muy bien en la zona del escote y del cuello para que no se noten cortes. Sin olvidarnos de las orejas y el nacimiento del pelo.
El tono del maquillaje
Es muy importante que escojas el tono correcto para tu base o polvos. Debe ser el más parecido al tuyo natural de la piel, si estás morena ahora en verano necesitarás uno producto algo más oscuro que el que sueles llevar en invierno, pero no te lo pongas cuando se te ha ido el bronceado pensando que parecerá que estás más morena, porque el resultado no será nada natural.