Si practicamos deporte para estar en forma y librarnos de esos kilos que nos sobran, ¿por qué no practicar también aerobic facial? Al fin y al cabo, el objetivo es el mismo, ¡poner en forma nuestra piel!
¿Te apuntas? En ese caso, no te pierdas los consejos que te explicamos hoy para prevenir las arrugas y presumir de belleza natural. Porque muchas expresiones faciales contribuyen a la aparición de arrugas, sin mencionar tampoco otros grandes enemigos de nuestra piel como por ejemplo la contaminación, los rayos de sol, el mal tiempo e incluso una mala alimentación.
Cosas que debes tener en cuenta
La expresión de nuestra cara es una carta de presentación muy importante, porque algunas cosas no se pueden ocultar con maquillaje. Como por ejemplo cuando nos enfadamos o estamos tristes e inevitablemente fruncimos el ceño, o cuando nos ruborizamos y entre-cerramos los ojos… Y así, con un sinfín de expresiones faciales más.
En este sentido, hay que tener en cuenta que no todas las arrugas y marcas que aparecen en el rostro son iguales. Según los expertos, las arrugas que más nos envejecen son las verticales, mientras que las horizontales son mucho más naturales y lejos de estropear nuestra belleza, aumentan nuestro atractivo. Y es que las arruguitas horizontales se producen cuando sonreímos, nos sorprendemos y por otras muchas reacciones innatas en los humanos.
Ejercicios para el ceño, la boca y el entrecejo
Y una vez aclarados todos estos puntos, ha llegado el momento de empezar con nuestro ejercicio facial. Para los ojos hinchados, tenemos que actuar en el contorno de ojos presionando suavemente y de manera circular por esta zona con ayuda de la yema de los dedos. Recuerda que debes comenzar por el centro y hacia el exterior.
El ceño es otra zona conflictiva del rostro. Para prevenir las arrugas y frenar las que ya están en la piel, tendrás que colocar la base de la palma de la mano en el entrecejo y presionar con suavidad. Entonces deberás subir poco a poco hasta llegar al nacimiento del cabello. Acuérdate de repetir este ejercicio dos veces más.
Y otro ejercicio que va muy bien consiste en masajear la boca entreabierta y la mandíbula con movimientos circulares, del interior al exterior.
Puedes realizar estos ejercicios en cualquier momento del día y siempre que tengas un momento, por ejemplo, después de una larga jornada de trabajo.