Después de varias décadas como reina del pop, Madonna vuelve a saltar a la palestra para defender su título y nos presenta su nuevo trabajo “Girls gone wild” con un vídeo en blanco y negro con alto contenido erótico. Este nuevo trabajo no ha hecho más que volver a encender la llama entre sus seguidores y los de Lady Gaga, con quien las comparaciones han sido constantes desde el nacimiento de esta nueva estrella.
Musicalmente hablando, son muchos los que dicen que Madonna vuelve a sus orígenes con este nuevo álbum, algo que a nivel estética yo no puedo compartir. La voz de temas tan tarareados como “Material girl” o “Like a prayer” se dio a conocer en los 80 con la típica melena permanentada tan representativa de aquella época, un estilismo que nada tiene que ver con el que hoy luce en “Girls gone wild”.
En este vídeo recién estrenado vemos a una Madonna que muestra 2 looks completamente diferenciados. Por un lado su imagen más actual con melena lisa en capas y mechas rubias y doradas. El maquillaje completamente nude en el que destaca el perfecto marcaje de los pómulos, con un trazado muy diagonal. Mirada delineada en el párpado superior, donde se le da el mayor protagonismo al peso de las pestañas. Este estilismo es el que emplea para las partes de baile.
El segundo look hace una regresión a la época de las divas del cine. Esta tendencia va en aumento día a día y lo estamos viendo en numerosas artistas. En su caso aparece con melena rubio platino al más puro estilo Marilyn, y el maquillaje se centra en el eyeliner muy marcado, y en los labios rojo pasión. El vídeo se cierra con una imagen que simula estar mal sintonizada (como ocurría con los VHS de los 80), y cuyo look dramático ha hecho que se la compare con Lady Gaga en su vídeo «Born this way», de quien se dice también toma algunos pasos de baile. La polémica está servida.