El Certamen de Miss España 2003 nos dio a conocer a una guapa y elegante sevillana, de nombre Eva González, que pronto se convirtió en uno de los rostros más habituales en pasarelas, anuncios, importantes eventos y programas de televisión.
A pesar de haber destacado siempre por su buena educación, su saber estar y discreción, Eva no pudo evitar formar parte de la prensa rosa al haber mantenido una relación con el guardameta madridista Iker Casillas hace unos años, y pasar a ser la novia del torero Cayetano Rivera en la actualidad. Esta última relación le ha llevado a formar parte de la selecta lista de invitados que ayer acudieron a la boda de la duquesa de Alba, donde, una vez más, Eva hizo gala de su elegancia, belleza y modernidad.
Para esta ocasión, la simpática sevillana lució un vestido azul de corte años 50, muy favorecedor y discreto, dado a la altura del cuello y el largo de la falda por debajo de las rodillas. Para lucir en su totalidad el detalle de los hombros, Eva se decantó por un recogido informal, peinado de última tendencia a lo largo de este último verano y que seguirá calando los próximos meses.
Para maquillarse, la novia de Cayetano encontró el equilibrio perfecto entre la moda, la estética y la finura. Como base, un maquillaje que no levantara aún más el bronceado natural que aún luce por estas fechas, apuntándose así a la clara tendencia nude que nos acompañará el próximo año.
Sus ojos, mostraban un sutil delineado en negro que sólo enmarcaba su mirada, sin ningún signo de exageración, delineado que acompañó de un fino trazo difuminado en el párpado móvil, completando el total una sombra en crema a modo de iluminador bajo el marco de la ceja. En sus labios, 2 toques del estilo que más veremos, por un lado, el perfilador un tono más alto que la barra y que se muestra de un modo muy casual; por otro lado, el toque de color que muestra un labio natural y carente de brillos.